Comer bien puede ayudarlo a sentirse mejor y a estar más fuerte durante y después del tratamiento del cáncer. Los pacientes que comen bien y mantienen un peso saludable a menudo toleran mejor los efectos secundarios del tratamiento. Una buena nutrición también ayuda al cuerpo a reemplazar las células sanguíneas y los tejidos que se dañan como resultado del tratamiento.
Un estilo de vida saludable tiene una función clave en cuanto a mantener el cuerpo fuerte, respaldar el sistema inmunitario (las células y proteínas que defienden al cuerpo de las infecciones) y reducir el riesgo de tener ciertas enfermedades, tales como ciertos tipos de enfermedad cardíaca y algunos tipos de cáncer. Una buena nutrición debería formar parte de un estilo de vida saludable que también incluye:
- Mantener un peso saludable
- Beber una cantidad suficiente de líquidos
- Ejercicio
- Relajarse (manejar el estrés)
- Dormir lo suficiente (entre 7 y 9 horas por noche para los adultos)
- No consumir tabaco ni abusar de las drogas ni del alcohol
Los alimentos no pueden usarse como tratamiento del cáncer, pero comer o beber algunas cosas y evitar algunas acciones son medidas que puede tomar para mejorar su salud y cómo se siente.
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PearlPoint, el sector de nutrición de LLS, ofrece este servicio tanto a los pacientes como a sus cuidadores.
The Leukemia & Lymphoma Society, Inc. y Pearlpoint Cancer Support brindan este servicio únicamente con fines informativos. No pretende sustituir el consejo de los profesionales médicos ni debería usarse con objetivos de diagnóstico médico, tratamiento o terapia. Consulte con los profesionales médicos a cargo de su atención antes de realizar cualquier cambio en su plan de tratamiento médico, alimentación o actividad física.
Enlaces relacionados
- Descargar o pedir la hoja informativa de la Sociedad de Lucha contra la Leucemia y el Linfoma titulada Información sobre los alimentos y la nutrición.
